Qué es el «Doxing» y cómo evitarlo

El «Doxing» es el nombre que recibe la práctica de «robar» o emplear la información pública que hay en Internet sobre un usuario o empresa con el objetivo de emplearla de forma negativa y asà atacar su reputación, desprestigiándolo, humillándolo, haciéndole bullying o incluso extorsionarlo.
Quienes practican el «Doxing» emplean información pública en redes sociales en contra de cualquier usuario
Se trata de una práctica cada vez más habitual y que se aprovecha del hecho de que los usuarios cada vez compartimos más información de forma pública en todo tipo de redes sociales. Sin embargo, los usuarios que practican el «Doxing», que no tienen por qué ser ciberdelincuentes profesionales, sino que cualquiera puede hacer un mal uso intencionado de la información disponible en las redes sociales, no solo se limitan ya a obtener información de Facebook, Instagram y otras redes.
También se puede practicar el «Doxing» atendiendo a la huella digital, el rastro online que deja cualquier persona en Internet al visitar un foto, al publicar un comentario en cualquier portal de noticias, o al hacer una compra online.
Quienes practican el «Doxing» con malas intenciones pueden recopilar toda esa información y, por ejemplo, hacerla pública en Internet, incluso mintiendo y tergiversando los datos, con un fin negativo como puede ser agobiarle o que, por ejemplo, sea despedido de su trabajo, o que su reputación profesional quede en entredicho.
¿Cómo evitar ser vÃctima del «Doxing»?
Lo principal es ser consciente de que todo acto que se realice en Internet implica dejar un rastro de información. Al colocar el nombre de un usuario, por ejemplo, en Google, aparecerán los enlaces a sus cuentas en redes sociales, comentarios que haya dejado en foros de Internet y más información, como sus datos laborales, académicos y mucho más. Todos estos datos podrÃan ser tomados por una persona que practique el «Doxing» para comenzar a acosar a su vÃctima.
Es difÃcil controlar toda la información que circula sobre uno mismo en Internet, más cuando se ha proporcionado de manera pública de forma consciente o cuando la ha facilitado otra persona, organismo o institución. De todas maneras, hay algunas acciones que se pueden tomar para «blindar» lo más posible el acceso a información personal si no se quiere que alguien pueda emplearla con fines ilÃcitos. SerÃan las siguientes:
-Configurar las cuentas de redes sociales como privadas, por lo que la información dejarÃa de estar accesible a cualquiera. AsÃmismo, se deberÃa aumentar la seguridad y controlar férreamente a quién se da o no acceso.
-Cuidar la información personal que sube a estas plataformas: evitar proporcionar direcciones, números telefónicos, direcciones de correo electrónico, entre otros datos de Ãndole personal.
-Controlar las páginas web que se visitan y no ingresar en sitios de servicios extraños o dudosos, que no proporcionen garantÃa de seguridad, evitando asà convertirse en vÃctima de «malware», los virus informáticos que roban información de los dispositivos donde se han instalado, como ordenadores o smartphones.
-Instalar herramientas de seguridad como antivirus y reforzar las contraseñas de acceso a cada servicio online.
-Estar al dÃa de todos los trucos, técnicas y marcas más usadas para robar datos e información por parte de los ciberdelincuentes, para estar alerta cuando se reciba un correo electrónico o un mensaje de WhatsApp que pueda resultar sospechoso.