Cinco gobiernos piden oficialmente tener acceso a los dispositivos de los usuarios

Siempre ha sido una de las teorías de la conspiración más extendidas: los gobiernos trabajan con las empresas tecnológicas para colocar «puertas traseras» para acceder a los dispositivos de los usuarios saltándose cualquier encriptación y sin levantar sospechas.
Los países miembros de Five Eyes han pedido a las empresas tecnológicas que implementen puertas traseras que permitan acceder a dispositivos encriptados
Pero no es tan fácil. De hecho, el FBI y otros cuerpos de seguridad de Estados Unidos se han quejado en múltiples ocasiones de que no pueden acceder a los iPhone de los criminales. Es por ello, que los gobiernos de cinco países -Estados Unidos, Reino Unido, Nueva Zelanda, Canadá y Australia- han pedido formalmente a las empresas de tecnología que construyan esos accesos.
La idea es que la ley siempre tenga acceso a los dispositivos encriptados. El comunicado advierte de que si las empresas no colaboran «los gobierno aplicarán medidas tecnológicas o legales» para acceder a terminales bloqueados y cuentas.
El comunicado ha salido a la luz de una reunión del pacto Five Eyes, que es un acuerdo que permite compartir inteligencia entre los cinco países ya citados. El comunicado dice que estas puertas traseras serían solo para facilitar las cosas a la justicia en caso de investigación criminal.
De momento se trata de un deseo o petición por parte de los cinco gobiernos, pero si las compañías se niegan, es posible que se termine convirtiendo en una orden.
La existencia de este tipo accesos a los teléfonos, ordenadores, etc, encriptados es una vulnerabilidad mayúscula a la intimida de los usuarios. Cualquier gobierno paranoico y con poco miramiento por los derechos de los ciudadanos podría empezar a echar vistazos a los datos de los usuarios por «prevención» y con la excusa de mantener un orden público.
Ninguna compañía ha hecho aún alguna declaración al respecto.