Este fin de semana se celebró -el sábado 17 de julio- el Día Mundial del Emoji (#WorldEmojiDay), una festividad que tiene lugar desde hace siete años y que conmemora la creación de estos iconos que permiten comunicarse de manera más fácil y expresar emociones en menos caracteres.
Los emojis fueron creados en septiembre de 1982
Los emojis nacieron el 19 de septiembre de 1982, cuando Scott Elliot Fahlman, científico de la computación en la Universidad Carnegie Mellon, inventó los primeros emoticonos para que ayudasen a entender el tono de los mensajes, utilizando dos puntos y el cierre del paréntesis, por ejemplo, para generar una sonrisa.
Sin embargo, hubo que esperar hasta 1999 para que aparecieran los primeros emojis a color, creados por Shigetaka Kurita, diseñador de interfaces japonés, que creó 176 caracteres de 12 x 12 píxeles, inspirados en la cultura japonesa como el manga y los kanjis, para la operadora de internet móvil NTT DoCoMo.
Hoy en día, los utilizamos a diario para estar en contacto con amigos y familiares, e incluso podemos saber en tiempo real cuáles son los que más se emplean. Pero no sólo se utilizan en el ámbito personal, sino que también se usan en entornos laborales, y cada vez más, según se afianza la práctica del teletrabajo.
En este sentido Hootsuite ha ofrecido una serie de consejos para emplear de forma correcta los emojis en el trabajo, con el objeto de que no proporcionen un mensaje confuso a quienes lo leen y no se cometa ningún error. Serían los siguientes:
-Utiliza los emojis más comunes: Los emojis más populares suelen ser, año tras año, las caras sonrientes, los corazones, los gestos con las manos… Para los trabajadores, aprovechar estos emojis tan eficaces centrados en el ser humano es una apuesta segura tanto para las comunicaciones externas con los clientes, como para las internas con el equipo. Así todos pueden saber realmente el significado de lo que se quiere decir, y no se comparte un icono cuyo significado se desconoce.
-Conoce bien al destinatario del emoji: Los emojis no significan lo mismo en todas las partes del mundo, por lo que si se manda un emoji a un cliente extranjero puede que no lo interprete igual.
-Sé positivo y deja de lado el sarcasmo: Los emojis tienden a ser más positivos que negativos, pero para el trabajo es mejor evitar todo el espectro de emojis negativos o sarcásticos, ya que los compañeros pueden confundir el mensaje que realmente se quiere transmitir.
-Todo con moderación: Cuando te comuniques en un contexto profesional, puede estar bien añadir algunos emojis estratégicos, pero no te excedas ni comprometas la claridad de tu mensaje.