Así es Dojo, la supercomputadora de Tesla
Tesla, una de las empresas del magnate propietario de X (anteriormente Twitter), Elon Musk, no es únicamente un fabricante y vendedor de automóviles electrónicos.
La compañía quiere liderar la carrera que muchas grandes empresas tecnológicas están lidiando por imponer sus desarrollos en materia de Inteligencia Artificial. Según los analistas, Tesla les lleva a muchas de ellas una importante ventaja.
Todo gracias al desarrollo de Dojo, una supercomputadora que la compañía lleva construyendo desde 2021. Su objetivo es entrenar, de manera autónoma, las redes neuronales de Inteligencia Artificial. En otras palabras, entrenar a las máquinas para llevar a cabo cada vez más procesos.
Dojo ha pasado de los bocetos en papel a la fase de producción en julio de 2023. Se trata de un superordenador que, empleando modelos de Machine Learning, es capaz de adiestrar modelos de Inteligencia Artificial aplicados a la conducción de coches autónomos.
Convertida en una de las principales apuestas personales de Elon Musk -el directivo ha señalado que gastará más de 1.000 millones de dólares el próximo año para su creación- se trata de uno de los ordenadores más potentes del mundo. Al entrenar modelos de IA temáticos, centrados en un único nicho, es capaz de evolucionar mucho más rápido que un superordenador de aplicación general.
Esto es así porque estos equipos están pensados para procesar miles de millones de datos, cantidades ingentes de información. En el caso de Dojo, como toda la información que procesa es relativa a la conducción, es capaz de generar modelos y patrones de forma más rápida.
Aplicación práctica de Dojo en la conducción autónoma
Dojo entrena de manera eficiente las redes de Inteligencia Artificial y los algoritmos de aprendizaje automático de los coches autónomos. Cualquier IA, para funcionar de forma eficiente, necesita miles de millones de datos y una capacidad y potencia de procesamiento muy elevada.
Cuantos más datos se le proporcionen, más potencia de procesamiento necesitará. Por eso las IA necesitan supercomputadoras que sean capaces de gestionar toda esa cantidad ingente de datos.
Tesla está empleando toda la información que extrae de los análisis de millones de vídeos e imágenes que realiza su supercomputadora para mejorar la función de autoconducción de los vehículos Tesla. Cuantos más datos se le proporcionen, mejor entrenada estará la IA para ser capaz de reaccionar ante todo tipo de situaciones.
Dojo permitirá mejorar la manera en la que se entrena una Inteligencia Artificial. En este caso, se aplica a la autoconducción de los vehículos autónomos de Tesla, pero podría aplicarse a cualquier otro propósito. Dojo podría emplear información para entrenar también a otras IA en otros sectores.
Procesador Chip Dojo M1
Esto es posible gracias al chip propio que ha desarrollado Tesla, el Chip Dojo M1, de una capacidad de proceso de datos superior. Tener su propio procesador -y no uno de un competidor como podría ser Nvidia- y una máquina tan potente en su poder, otorga a Elon Musk -y a Tesla- una posición privilegiada en la carrera por crear uno de los supercomputadores más importantes del mundo. Con equipos como este, con aplicación en cualquier ámbito, quien sea capaz de desarrollarlo e imponer su modelo, obtendrá una ventaja importante frente a sus competidores.
Según Elon Musk, Dojo podría estar completamente operativo en 2024. Su creación ha elevado las acciones de Tesla considerablemente -hasta un 60% en las últimas semanas- y se espera que sigan haciéndolo durante los próximos meses.
De hecho, Morgan Stanley ha considerado que «Dojo» podría cumplir todos los requisitos para ser una auténtica revolución y convertirse en el standard en el mercado. Procesa datos visuales y permite resolver operaciones autónomas, ya sea para vehículos, fábricas o, por qué no, hasta humanoides.