Enrique Dans: «Zuckerberg quiso engañarnos creando el «metaverso»»

ENTREVISTA a Enrique Dans, experto en tecnología, senior advisor en innovación y transformación digital en la IE University, asesor de startups y compañías consolidadas y autor que acaba de publicar el libro «Todo vuelve a cambiar» en Editorial Deusto. En él, realiza un certero repaso por las tendencias tecnológicas actuales y cómo cambiarán en el futuro la manera de relacionarnos y de entender Internet.
-Enrique, ¿Qué entenderíamos por Web3?
-La idea de una Web3 se corresponde con el uso de un protocolo, la cadena de bloques, para registrar todo lo que ocurre en la web, desde la publicación de un contenido hasta un pedido, un intercambio económico, o en general, cualquier transacción. Eso debería hacer que nos diéramos cuenta de que, en realidad, incorporar un protocolo no es problemático, porque todos usamos internet a todas horas y, sin embargo, muy poca gente sabe lo que es el protocolo TCP/IP.
La cadena de bloques es percibida, en general, como algo complejo y farragoso, cuando en realidad, no lo es, y esa ha sido una de las razones fundamentales para escribir un libro en el que intento, precisamente, explicarla de manera didáctica.
En la Web3, además, utilizaremos otras cosas, como los wallets criptográficos para gestionar nuestra identidad (en lugar de depender de las big tech o de nuestra empresa para ello), de los tokens para certificar nuestra propiedad de algo, o de los smart contracts para definir requisitos y obligaciones en cualquier relación, por ejemplo. El libro es un intento de explicar todos estos conceptos de una forma sencilla.
-¿Cuáles son los cambios más importantes que van a cambiar la manera en la que entendemos Internet en los próximos años?
-El cambio más importante es, sin duda, la descentralización. Vamos a ver cómo las big tech que han dominado la escena durante los últimos años y se han convertido en las compañías más grandes del mundo gracias al dominio de nuestros datos pierden ese dominio, y son los usuarios los que obtienen más control de su actividad y de los datos que generan.
Además, veremos al machine learning jugar un papel cada vez más activo en muchas de las cosas que hacemos, desde la búsqueda de información hasta muchas tareas en las que actuarán como asistentes de automatización avanzada.
-¿Quiénes serán los principales actores en ese nuevo Internet del futuro?
-Los principales actores de esa Web3 serán, sin duda, los usuarios. Hasta ahora, teníamos que movernos por la red con una identidad que nos generaban casi siempre las empresas, bien aquella en la que trabajamos o alguna empresa tecnológica.
Zuckerberg fracasó al querer construir una plataforma como jardín vallado con la que quiso engañarnos al llamarla «metaverso»
En el futuro, tú serás el dueño de tu wallet criptográfico, que no revelará necesariamente tu identidad si tú no quieres, y en el que almacenarás todos tus activos digitales: tu dinero, tus propiedades (NFTs, tokens, diplomas, acreditaciones, etc.) y también tu información, que podrás dejar ver a quien estimes oportuno. El cambio más importante es que, al estar todo registrado en la cadena de bloques, la confianza será una parte esencial construida sobre el propio sistema.
-¿Seguirá Facebook, Zuckerberg, teniendo un papel fundamental?
–Zuckerberg fracasó al querer construir una plataforma como jardín vallado con la que quiso engañarnos al llamarla «metaverso» – cuando claramente no tenía que ver con eso, sino que era simplemente un videojuego glorificado – y ahora lleva algún tiempo dedicándose al recorte de personal y de costes, intentando obtener eficiencia cuando, en la práctica, lo que pretende es prolongar un poco más su actividad sin caer demasiado en bolsa.
Probablemente veremos un tiempo en el que intentará seguir torturándonos con su publicidad hipersegmentada – esa que nos vuelve paranoicos porque parece que nos está espiando y escuchando todo el tiempo – aplicando machine learning a la administración de publicidad, pero en último término serán los propios usuarios los que le digan que están hartos de ser simplemente objetos con cuyos datos personales se comercia.
-¿Qué pasará con Twitter y las jugadas de Elon Musk?
-La redefinición de Twitter a manos de Elon Musk tiene muchas papeletas para convertirse en un estímulo importante para la Web3. Si Musk decide, como algunos apuntamos, a empezar a utilizar wallets para la identificación de los usuarios (y quitarse así la espantosa plaga de spambots que tiene en su red) o incorporar criptomonedas al funcionamiento de Twitter, veremos de repente como cientos de millones de usuarios se incorporan a la Web3.
Los wallets criptográficos serían una alternativa muy interesante para Twitter, porque le permiten mantener un control de identidades sin necesidad de revelar quién está detrás de cada cuenta (que podría ser, por ejemplo, un homosexual en un país islámico o un disidente en China). Y si se decide a utilizarlos, podría avanzar en la idea de esa aplicación X multifuncional de la que ha hablado en ocasiones.
-¿Cree que llegará el metaverso a popularizarse? ¿De qué manera?
-El metaverso, convertir la web en un entorno tridimensional e inmersivo, es algo inevitable, pero tendrá lugar cuando cualquiera pueda construir sobre él con un conjunto de protocolos de código abierto, sin tener que aceptar los términos de servicio de ninguna compañía en concreto. Creer que todos íbamos a dedicarnos a construir nuestra presencia sobre una plataforma construida por Meta era una aberración: lo hicimos una vez, y ya conocemos el resultado, que ha provocado desde manipulación electoral hasta genocidios.
-Las criptomonedas… parece que ahora mismo son activos menos seguros o en horas bajas de cotización. ¿Habrá que olvidarse de ellas… o serán responsables de una redefinición del dinero por completo?
-Creer que las criptomonedas pasan por horas bajas simplemente porque ha habido en ellas algunos sinvergüenzas que han engañado a muchas personas es no entender nada. En todos los fenómenos de adopción, hasta en la fiebre del oro, surgen sinvergüenzas interesados en separar a tontos de su dinero.
Las criptomonedas, y concretamente las dos que ya han alcanzado suficiente masa crítica, bitcoin y ethereum, son el futuro del dinero, y eso es completamente inevitable, porque son simplemente superiores al dinero que conocemos.
Permitir que los bancos centrales y los estados sigan pudiendo manejar el dinero a su antojo, emitir más y provocar inflación o subir y bajar los tipos de interés es algo completamente irresponsable: ese control no debería estar ahí. Queremos dinero que dependa únicamente de las matemáticas, que no pierda valor y que no pueda ser utilizado políticamente.
La tecnología no va a quitarte el trabajo, pero sí podrá quitártelo alguien que tenga con esa tecnología más familiaridad que tú
-¿Qué papel jugarán las inteligencias artificiales? ¿Es ChatGPT sólo una moda pasajera o el germen de lo que está por venir?
El machine learning – no deberíamos llamar inteligencia artificial a algo que no es ni inteligente (es simplemente estadística) ni artificial (no hay nada más natural que los datos que nosotros mismos generamos) – se va a configurar como uno de los elementos más importantes no solo en el futuro de la web, sino también del trabajo o incluso de la civilización humana.
Es, como dijo Sundar Pichai, CEO de Alphabet, un cambio comparable en sus efectos a lo que produjo el fuego o la electricidad. En el futuro veremos cómo descienden las barreras de entrada al desarrollo de algoritmos, y todos tendremos nuestros propios algoritmos que automatizan muchas de las tareas que llevamos habitualmente a cabo, con arreglo a nuestros propios criterios.
-¿Cómo podemos adaptarnos y prepararnos para sacar el máximo partido a todos estos cambios?
-La única manera de adaptarnos y prepararnos es estando mejor informados, y practicando, mediante la experiencia práctica. Lo que intento en mi libro, además de explicar las cosas de una manera sencilla como llevo haciendo durante mis treinta y dos años de vida profesional, es invitar a los lectores a que prueben los conceptos de una manera práctica: que compren una cantidad pequeña – veinte euros, cincuenta… algo que puedan gastarse sin demasiados remordimientos – y que las manejen, que hagan cosas con ellas: comprarlas en un exchange como Coinbase o Binance, adquirir un wallet, pasar esas monedas a su wallet personal, usar su wallet para identificarse, etc. La tecnología no va a quitarte el trabajo, pero sí podrá quitártelo alguien que tenga con esa tecnología más familiaridad que tú. Por tanto, ponte las pilas y no permitas que eso suceda.