Entrevista a Miquel Pellicer y Marta Franco, autores de «Optimismo para periodistas»
ENTREVISTA a Miquel Pellicer y Marta Franco, autores del libro «Optimismo para periodistas«, en el que se ofrecen las claves para entender el papel de los medios en la nueva era de la comunicación digital. En el texto se ofrece una visión realista de la nueva situación del periodismo, pero que anima a ver el vaso medio lleno e incita a continuar queriendo luchar por esta profesión. El libro ha sido publicado por la Editorial UOC.
– Vuestro libro es una auténtica radiografía de la situación actual del periodismo. ¿Es tan negativa como algunos se empeñan en pintárnosla?
MF: La crisis en la industria de los medios de comunicación todavía es latente y arrastra una destrucción de empleo desgarradora, pero a pesar del retroceso de la profesión, tanto económico, de prestigio y de rol en la sociedad, hay razones para ser optimistas.
Se abre paso una generación dispuesta a experimentar y a lanzar nuevos proyectos (el denominado “periodismo emprendedor”). Además, nunca se ha consumido tanta información como ahora y el periodista nunca ha tenido tantas herramientas para contar cosas, para aprender, inspirar e informar a la audiencia, contactar con las fuentes y compartir su contenido.
– ¿Cuáles creéis vosotros que son las claves para que el periodismo continúe siendo “El oficio más bonito del mundo”?
MP: Sobre todo entender que ahora el poder ya no está en la información, sino en cómo la compartimos. Contamos con una audiencia omnipresente interconectada que quiere participar. Es un sueño poder seguir explicando historias cotidianas con ética y compromiso social teniendo a la gente más cerca que nunca.
El periodista nunca ha tenido tantas herramientas para contar cosas, aprender, inspirar e informar
– Especialización, emprendimiento y, sobre todo, capacidad de adaptación, son algunas de las premisas que defendéis en el libro. ¿Qué les falta a algunos periodistas, acomodados en las redacciones, para despertar y ponerse manos a la obra para seguir evolucionando con la profesión?
MF: Pensar que tienen la suerte de ejercer una profesión en constante cambio que vive un momento de excitantes retos. Una actitud abierta es crucial. Los muros de lamentaciones no nos permiten reinventarnos. Las nuevas tecnologías no son el enemigo, al contrario en estos momentos son un gran aliado para el periodismo. Para entender las nuevas ventajas que éstas ofrecen es fundamental que el medio en el que trabajan les ofrezca una formación constante que les permita desarrollar esas nuevas competencias.
– ¿Cómo ha cambiado Internet el ejercicio del periodismo?
MP: Internet ha sacudido las rutinas periodísticas, la relación con la audiencia, los formatos y los consumos de los contenidos. Ha provocado una auténtica revolución para la profesión. Los cambios tecnológicos y la globalización han obligado a los medios a reconvertirse para adaptarse. En el escenario digital los modelos continuistas no han entendido las nuevas reglas del juego y no han funcionado.
– ¿Se le puede considerar culpable de sus males?
MF: Está claro que con Internet los medios han perdido el monopolio de la publicidad y el de la verdad absoluta, y han tenido que pelear con feroces competidores que han sabido comprender el comportamiento de los consumidores digitales y adaptarse a los cambios más rápidamente. Si tenemos que buscar un malo para esta película es más justo, no obstante, señalarnos a nosotros mismos, a la falta de innovación, a la soberbia, al distanciamiento con la audiencia, al acercamiento al poder, así como a numerosos errores editoriales y empresariales.
– ¿Y de algunos aspectos positivos?
MP: Un aspecto positivo de la llegada de internet es que se hace más necesaria la existencia del periodista. Aunque los periodistas ya no son los únicos guardianes y creadores de la información su control de calidad, verificación, filtrado y contextualización para aportar valor añadido se intensifica. Jugamos un rol necesario para sobrevivir a la «infoxicación” a la que estamos expuestos.
Con Internet los medios han perdido el monopolio de la publicidad y la verdad absoluta
Otro aspecto interesante es que contamos con nuevas herramientas para experimentar con la visualización de datos y el uso de diversos formatos interactivos que nos permiten hacer más atractivos nuestros contenidos. Sólo hay que echarle un vistazo a los ejemplos que destaca el periodista Josh Stearns en “The Best Online Storytelling and Journalism of 2014” para darse cuenta de la infinidad de nuevas posibilidades que existen de contar las cosas de una manera diferente.
– ¿Qué no hemos entendido a la hora de buscar la monetización de los nuevos medios de comunicación?
MP: Más que no entender, hemos asumido que comprar periódicos sería eterno y la ceguera del momento nos ha hecho descuidar el enorme precipio que había unos pasos más allá. El modelo de negocio tradicional está agotado. La gente ya no está dispuesta a pagar un euro por contenidos que son de ayer.
– ¿Se encontrará en algún momento el modelo a seguir? ¿Por dónde pasará?
MF: Hay diferentes modelos de negocio que están empezando a funcionar. Pero no hay un único ejemplo. Cada uno funciona de forma diferente según sus recursos y su tipo de contenido. Para algunos, como New York Times o Wall Street Journal, el muro de contenidos empieza a ser rentable. Pero lo que es válido para unos, no lo es para otros. Algunos medios deberán explorar modelos de negocio basado en los servicios o en las aplicaciones, por ejemplo.
– ¿Cuáles serían las cualidades que debe tener a partir de ahora el periodista?
MP: En la actualidad estamos viviendo aún un proceso de redefinición de qué es ser periodista y, por tanto, estamos en constante evolución. Hay nuevas competencias digitales que exigen que los periodistas debamos tener unas características muy flexibles. Hay que ser capaces de compartir información, trabajar en equipo y estar abiertos a una formación contínua. La crisis del periodismo viene por muchos factores externos pero hay que tener en cuenta que a veces nosotros mismos somos nuestros propios enemigos.
– ¿Y los nuevos roles que tendrá que asumir?
MF: Creo que hay que especializarse pero todos tenemos que saber un poco de todo. Actualmente hay que saber potenciar las nuevas narrativas, hay que saber trabajar como periodista de datos, conocer formatos multimedia, potenciar contenidos nativos para móviles y tablets… Hay un montón de competencias que debemos conocer.
Es obvio que el periodista debe ser activo en redes sociales
No nos pueden pedir que seamos ‘periodistas-orquesta’ para ahorrarse presupuesto. Pero es obvio que tenemos que ganar experiencia en muchos campos digitales que en algunos casos no existían hace dos años. Y es obvio que tenemos que seguir siendo activos en las redes sociales, para potenciar la doble marca: la personal y la empresarial. Las redes sociales son una referencia como fuente de información, relación profesional y contacto con la audiencia. Por tanto, debemos saber manejarnos.
– ¿A qué aspectos básicos de la profesión no renunciará nunca?
MP: A la honestidad, la profesionalidad, la independencia, la contrastación informativa, o la crítica. Estos son los ejes fundamentales del periodismo que debemos defender, en un mundo online y offline, cada vez más interconectado. La profesión ha cambiado, cambia y cambiará pero hay cosas irrenunciables. En este sentido, somos optimistas. Por mucho que intenten destruir la profesión, hay buenos profesionales que mantienen su integridad. Hay que saber transmitir este mensaje a las futuras generaciones.
– ¿Cuál es vuestra recomendación para quienes se inician en el estudio/ejercicio de la profesión?
MF: Que sean capaces de ganar experiencia y ganar credibilidad y reputación, que no es una tarea fácil. Para ello, deben estar atentos a lo que pasa en la profesión y en su entorno. Deben ser capaces de sacar su vena crítica para no conformarse con lo que ofrece el mercado laboral. Hay que evolucionar, ser flexibles y no cansarse nunca de aprender.