Facebook quiere que le envíes tus fotos íntimas para protegerte contra el porno vengativo
Facebook quiere ayudar a quienes se consideren potenciales víctimas del llamado porno vengativo. Cuando una pareja rompe, son muchos los usuarios que temen que conversaciones íntimas o fotos comprometidas salgan a la luz de las redes sociales.
La iniciativa ha comenzado en Australia de la mano del gobierno
El problema es que, con ánimo de herir, ridiculizar y humillar a la otra persona, distribuir sus fotos por Internet hace que pasen a ser propiedad de todo aquel que lo vea, lo comparta o lo retuitee. El fenómeno de viralización de un documento tan sensible es, a la vez, imparable e impredecible.
Por eso Facebook está animando a que todo aquel que se sienta desprotegido por esta causa envíe a la plataforma la imagen en cuestión con la que pueden chantajearle.
Así, a través de Messenger, las imágenes se hacen trizas de manera virtual; la compañía las transforma en una huella digital única que las víctimas pueden emplear para identificar, rastrear y bloquear cualquier intento de subir esa misma imagen a Facebook, Messenger o Instagram.
Otorgarle cierto poder a quienes sufren o pueden sufrir este tipo de abuso es algo novedoso: hasta la fecha, la prevención era la mejor herramienta para no caer en situaciones peligrosas.
De momento la red social ha puesto en marcha la iniciativa en Australia, de la mano del gobierno. Primero, un grupo de especialistas la analiza y la elimina, y después Facebook la almacena para asegurar que el proceso se ha llevado a cabo correctamente.
Justo esta semana la cantante australiana Sia ofrecía a todo Internet una foto suya desnuda. Lo hacía para acabar con el chantaje al que se veía sometida por un hacker que había conseguido imágenes robadas y que pretendía lucrarse también a costa de vendérselas a sus fans.
Aunque desde luego la propuesta de Facebook supone una herramienta extra para las posibles víctimas, entregarle a una compañía tan grande un material tan delicado también puede levantar cierta desconfianza.
