Google enseña en secreto a programar a una Inteligencia Artificial

El continuo avance de la inteligencia artificial en cada vez más ámbitos uno de ellos tiene que ver con el código de programación, en el que Alphabet (matriz de Google) está trabajando de manera que se desarrolle una inteligencia artificial capaz tanto de crear código ex novo como de corregir otro código ya escrito anteriormente.
La inteligencia artificial replica procesos del intelecto humano a través de algoritmos e instrucciones, llegando a poder aprender por sí sola
Este proyecto forma parte de otro más amplio en el que la inteligencia artificial sea capaz de utilizar algoritmos para crear imágenes, vídeos… y también código. Este proyecto, conocido con el nombre en código de Pitchfork (en español horca, en referencia al instrumento de labranza) pasó este verano a Google Labs, el departamento de desarrollo de proyectos especiales, lo que indicaría la importancia que se concede en el seno de Alphabet.
El departamento de Google Labs ha sido el encargado, a lo largo del tiempo, de desarrollar tanto proyectos punteros que han llegado a convertirse en productos y servicios finales (como las Google Glass) pero también a descartar otros que no lograban tener una utilidad práctica o aprovechable.
En concreto dentro de Google Labs el desarrollo de Pitchfork recae sobre el departamento denominado Asistencia al Desarrollo de Inteligencia Artificial, dirigido por Olivia Hatalsky, empleada con una larga trayectoria en Google X y que ya trabajó, entre otros proyectos destacados, en el desarrollo de las Google Glass.
En el caso de la inteligencia artificial este año 2022 ha sido sin duda el que ha sorprendido con las que permitían generar imágenes fotos realistas a partir de descripciones en texto con nombres como DALL-E, Midjourney o Stable Diffusion.
Pitchfork se ha desarrollado con el objetivo de ser capaz de aprender a escribir código e incluso ser capaz de reescribir su propio código, con la intención de aplicar lo que «aprende», dado que las inteligencias artificiales se distinguen por se capaces de emular procesos de razonamiento similares a los humanos pero también de aprender por sí solas, aplicando los conocimientos adquiridos.
En este caso el trabajo se centra en lograr que el equipo de investigación sea capaz de encontrar aplicaciones y vías en la que la inteligencia artificial pueda servir de ayuda a los desarrolladores.