Google prueba los mensajes directos en Google Shopping
Google está probando una nueva forma de comunicación para las empresas y los comerciantes que utilizan el servicio Google Merchant Center y Google Shopping, y que permitirá a estos conectar con los usuarios y clientes de una forma mucho más cercana a través de Google Shopping.
Google permitirá a los usuarios enviar un mensaje a las tiendas directamente desde el carrusel de Google Shoping en el buscador.
La prueba de este sistema de mensajería directa fue anunciada a los comerciantes de Merchant Center a través de un correo electrónico en el que se explica que se trata de una función opcional que permitirá a los clientes enviar mensajes directos a la dirección de correo electrónico que se haya configurado en el servicio Google Merchant Center como dirección de atención al cliente.
De esta forma, Google permitirá que los clientes puedan enviar un mensaje a un comerciante, directamente desde el servicio de Google Shopping. Este mensaje se enviará por correo electrónico al comerciante y este tendrá la posibilidad de responder para enviar a ese cliente un mensaje a cambio.
Por ahora, se trata de un proyecto piloto que no está abierto a todos los usuarios de Google Merchant Center, sino que será necesario solicitar acceso al mismo y ser aceptado por parte de Google. Por ahora, no hay información adicional sobre si esta herramienta se implementará de manera oficial, si lo hará para todas las regiones o cuando lo hará.
A continuación, podemos ver el correo enviado por Google a los usuarios de Merchant Center y en el que se explican los detalles que hemos analizado en el artículo:
Google Merchant Center es una herramienta de Google que sire para introducir datos de una tienda online, como la marca, tipo, ID, precio y descripción de los productos, y poder participar en el servicio Google Shopping.
Por su parte, Google Shopping es el catálogo virtual de los productos de aquellas tiendas que se han registrado previamente en Google Merchant Center. Estos productos tienen una caducidad de 30 días, por lo que se requiere una gestión y revisión continua para que no sean eliminados automáticamente.
