CTRL + ALT + SUPR es un atajo de teclado que se utiliza para reinciar una computadora. Este atajo, que ha superado la barrera de la informática y ya forma parte de la cultura popular, fue creado de una forma muy curiosa. Esta es la historia de cómo se inventó CTRL + ALT + SUPR.
El atajo fue creado por David Bradley, pero se hizo popular gracias a Microsoft Windows y su problema con la pantalla azul.
El atajo CTRL + ALT + SUPR fue creado en 1981 por David Bradley, uno de los diseñadores de los primeros ordenadores personales de IBM. Bradley ideó este atajo para reiniciar los ordenadores de forma rápida, y poder saltarse las comprobaciones de memoria del arranque, lo que les permitía ahorrar mucho tiempo en cada reinicio.
Bradley empezó a trabajar para IBM en 1978. En 1981 fue seleccionado para el proyecto «ACORN», que sería el primer ordenador personal de IBM. En él hizo de todo: escribió programas de entrada y salida y resolvió problemas de tableros de alambre. A los cinco meses de trabajar en el proyecto, creó el famoso «ctrl+alt+supr». Creó el atajo en solo cinco minutos y escogió las teclas por su ubicación; con la tecla SUPR en la parte opuesta del teclado, parecía poco probable que las tres fueran presionadas accidentalmente al mismo tiempo.
El atajo era una herramienta interna, para él y sus compañeros, ya que tenían el tiempo justo para terminar el proyecto y cada segundo contaba. Jamás pensó que el atajo se pondría a disposición del público y mucho menos llegó a imaginar que se introduciría en la cultura popular.
Gracias al trabajo del equipo de Bradley, el primer ordenador de IBM llegó a los estantes a tiempo para el otoño de 1981 y rompió incluso las predicciones de venta más optimistas, llegando a vender millones de unidades. El proyecto «Acorn» cambió la informática para siempre e introdujo los ordenadores en los hogares.
En ese momento, pocos usuarios conocían el atajo, no sería hasta principios de los 90 cuando se popularizó gracias a Microsoft Windows. El motivo fue la famosa «pantalla azul de la muerte» de Windows que bloqueaba los ordenadores, el atajo de Bradley resultó ser una solución rápida y sencilla a ese problema que tanto atemorizaba a los usuarios.
Desde entonces, CTRL + ALT + SUPR ha pasado a ser una acción muy común entre los usuarios de ordenadores, e incluso a trascendido al mundo de la informática para incorporarse en la cultura popular… lo mismo que también lo hicieron la tecla de la arroba o la de la almohadilla (empleada para identificar a los hashtags) años más tarde.