Los vídeos en directo de Facebook llegan al ordenador
La función de hacer vídeos en directo para Facebook, hasta ayer era cosa de mucha batería y un buen control del pulso a la hora de sujetar nuestro teléfono móvil.
Facebook, sin embargo, ha lanzado ya la opción de realizar este tipo de interacción con nuestra comunidad a través del escritorio del ordenador, con lo que a partir de ahora podremos mostrar en directo lo que estemos haciendo a través de la versión de escritorio de la red social, tal y como había avanzado en el mes de septiembre. La posibilidad se comienza a implementar ahora.
La herramienta estará primero disponible en Estados Unidos, para llegar al resto de países
Parece que la idea parte de intentar dar más soporte a profesionales como periodistas y videobloggers, que concentran en Facebook a un gran número de su audiencia y que utilizan otras plataformas, como YouTube, para publicar sus vídeos.
Inicialmente, los vídeos en directo de Facebook competían con la opción de hacerlos en Twitter a través de Periscope, pero ahora también se pueden realizar por ejemplo a través de Instagram. De momento, eso sí, la posibilidad de utilizar Facebook Live desde nuestro portátil u ordenador de mesa llegará de forma escalonada en los próximos meses a todos los usaurios.
Los directos de Facebook, que en principio y como todas las herramientas, tiene una versión positiva para poder mostrar a nuestros amigos qué estamos haciendo en el momento y recibir su feedback, tiene un lado oscuro: no son pocas las noticias que hablar de acoso y agresiones filmadas y retransmitidas a través de Facebook Live. Esta semana, sin ir más lejos, una agresión sexual a una niña de 15 años fue difundida por esta herramienta con más de 40 personas asistiendo en directo al vídeo.
La actitud de Facebook frente a este tipo de uso es la de eliminar las cuentas de quienes graben contenido ofensivo o inadecuado, algo que de momento sólo descubre mediante los reportes de otros usuarios.
Actuar más rápido ante este tipo de sucesos es clave y una asignatura pendiente para la compañía de Mark Zuckerberg, que parece tener un largo camino por delante para garantizar la seguridad de los usuarios en este tipo de casos.