¿Podemos llegar a quedarnos sin Internet?

La noticia de la muerte de Michael Jackson provocó el colapso de muchas páginas web, que debido al aumento de tráfico vieron cómo sus sistemas quedaban inoperativos.
De hecho según la firma Akamai, el día -la noche más bien en España- de la muerte de Michael Jackson el tráfico de la Red se incrementó, a nivel global, en un 11%.
Ese crecimiento de la demanda provocó que Internet prácticamente se colapsase durante horas. Incluso Google vió cómo su buscador funcionaba mucho más lento de lo habitual…
¿Puede esto significar que la Red está llegando a su límite?
¿Necesita más capacidad? Si, es cierto que a estas alturas esta es la eterna pregunta, pero ahora que tendemos más a que todas las comunicaciones pasen por Internet, a que todas las aplicaciones empresariales comiencen a estar fundamentadas en la Red -véase el Cloud Computing- el problema ya no reside en poder acceder a una web o al correo o no… sino que la gravedad del asunto puede ser mucho mayor…
¿Podemos confiar en un sistema que en ocasiones se vuelve inestable? ¿Cuál es la solución?