Por qué los niños no miran YouTube Kids

Un grupo de activistas ha celebrado una cumbre de Common Sense Media acerca del llamado «bienestar digital» que se ha centrado en medir el impacto de las apps y plataformas virtuales en la vida de los usuarios, prestando especial atención a los niños.
La directora de políticas familiares y control parental de YouTube ha expresado que la plataforma no es segura para los niños
El panel «NSFK» o «not safe for kids» todos los activistas señalaron a un principal culpable: YouTube. No es la primera vez que ocurre, pero la cumbre ha reabierto un fuerte debate acerca de las negligencias de YouTube y el efecto que esto tiene sobre los millones de niños y adolescentes que visitan su plataforma diariamente.
De hecho, Alicia Blum-Ross, la directora de YouTube en materia de políticas familiares y control parental, ha dicho públicamente que la compañía cree que «la web general de YouTube no es apta para niños».
En este sentido, la red social ha hecho esfuerzos por refinar su algoritmo y eliminar los vídeos dañinos. Tan solo a inicios de este año la compañía eliminó más de 800.000 vídeos que violaban las políticas comunitarias. Sin embargo, el esfuerzo parece ser insuficiente en una plataforma conocida por la viralización de noticias falsas y la difusión de contenido terrorista y extremista.
Además, la exposición de los niños y adolescentes a YouTube resulta indetenible. De acuerdo a las cifras de Insight Strategy Group, tan solo en Estados Unidos el 97% de los niños ha usado la plataforma de YouTube para consumir alguna clase de contenido.
Esto representa un reto para los padres y tutores, quienes se ven indefensos ante el fácil acceso a la tecnología y la amplia difusión de contenido dañino de todo tipo.
Trabajadores anónimos de YouTube han revelado a Bloomberg que la mayoría de las familias dentro de la empresa prohíben a sus hijos el uso de YouTube sin supervisión, y una parte de la compañía ha sugerido la separación de YouTube de la marca Google para evitar dar mala publicidad a la empresa matriz.
Ante toda esta polémica, YouTube ha intentado mitigar los problemas creando su plataforma independiente para niños, YouTube Kids, pero el experimento ha sido fallido.
La plataforma de YouTube Kids resulta poco popular entre los infantes, quienes, de acuerdo a datos de la propia empresa, terminan trasladándose a la página principal antes de cumplir los 13 años.
De hecho, canales de YouTube como «Cocomelon», un canal con canciones de cuna en ingles, son sumamente populares dentro de la plataforma, alcanzando hasta los 50 millones de suscriptores, 30 millones más que el total de visitas semanales de YouTube Kids.
Además, la plataforma para niños tampoco ha demostrado ser verdaderamente segura para los infantes. Los usuarios han encontrado vídeos con contenido pornográfico y hasta un vídeo con instrucciones para suicidarse.
Ante esto YouTube ha intentado introducir mejoras en su algoritmo de selección y según Blum-Ross, la plataforma lanzará opciones para controlar el tiempo de visualización en pantalla. Sin embargo, la mayoría de los padres coincide en que la plataforma no ha hecho una verdadera curación de contenido, exponiendo a los niños a toda clase de peligros e información sensible.