Qué es un hotspot WiFi y para qué sirve

Un hotspot WiFi es un punto de acceso que proporciona conexión a Internet a otros dispositivos. Pero con el tiempo se ha multiplicado la tipología de estos hasta que, de hecho, cada teléfono móvil (al menos los de últimas generaciones con las versiones más actualizadas del sistema operativo) pueden funcionar como hotspot y ofrecer prestaciones de punto de acceso.
Existen hotspots o puntos de acceso a Internet tanto fijos como móviles, 5G, públicos…
Es algo que muchos usuarios incluso harán de forma cotidiana, al ofrecer acceso a Internet mediante WiFi y la propia conexión de datos del smartphone a otros dispositivos como pueden ser tablets, ordenadores portátiles, consolas portátiles, lectores de ebooks…
Pero esa conexión inalámbrica con puede establecerse con distintos tipos de hotspots, puesto que estos puntos de acceso pueden ser tanto fijos como móviles, más allá de que el propio teléfono móvil pueda llegar a funcionar como uno de ellos.
En cualquier caso el hotspot ofrece cobertura WiFi pero al hotspot hay que proporcionarle acceso a Internet. Este podrá ser mediante cable Ethernet que le conecte con el router de la instalación fija o bien con una tarjeta SIM que le permita acceder a la señal inalámbrica de un operador de telefonía fija.
-Hotspot fijo: Ofrecen una mayor potencia de señal, mayor cobertura, permiten el acceso a un número mayor de dispositivos y pueden ofrecer a todos ellos un ahorro ancho de banda. Se instalan de manera permanente y se conectan mediante red Ethernet a un router y reciben alimentación de la red eléctrica también mediante cable, sin batería.
-Hotspot móvil: Son pequeños dispositivos, de tamaño inferior a un smartphone, dotados de su propia conexión, su propia batería recargable y su propia bandeja para tarjeta SIM. Tras colocar y configurar dicha tarjeta (que necesita su propia línea de datos móviles) ofrecerá cobertura WiFi a los dispositivos que haya a su alrededor exactamente igual que si se tratase de un router WiFi inalámbrico. Todos suelen ofrecer conectividad 4G pero ya comienza a haber variedad de dispositivos con 5G. Pueden ser muy útiles en viajes en los que no se quiera depender de encontrar redes WiFi públicas o en eventos no muy numerosos donde se prefiera disponer de control sobre la conexión móvil que se ofrece a grupos reducidos de usuarios.
-Hotspot 5G: Pueden ser tanto fijos como móviles y la diferencia con los ya mencionados es que se añade la cobertura 5G
-Hotspot público: Museos, estaciones, aeropuertos… diversos organismos y espacios públicos pueden ofrecer un servicio gratuito de acceso a Internet. Habitualmente la conectividad es limitada en cuanto a velocidad o ancho de banda, y salvo casos de necesidad no es muy recomendable fiarse de este tipo de accesos públicos y se recomienda dotar al dispositivo de medidas de seguridad (cortafuegos, VPN, navegación
-El hotspot del móvil: Es el que queda más al alcance puesto que lo incorporan la mayoría de los smartphones de últimas generaciones y puede activarse desde la configuración de la conectividad inalámbrica. Valiéndose de la conectividad 3G/4G/5G el móvil se conecta con su plan de datos y mediante WiFi se convierte en un punto de acceso al que pueden conectarse otros dispositivos para acceder a Internet.
Algunos operadores limitan esta capacidad y los propios fabricantes de móviles y desarrolladores de sistemas operativos pueden establecer también límites a la cantidad de dispositivos que pueden acceder a la red WiFi que genera el hotspot del móvil, oscilando habitualmente entre 10 y 15 dispositivos. La configuración que permite compartir la conexión del móvil también permite establecer una contraseña para restringir quién puede acceder a esta red WiFi compartirá.