Silenciar, bloquear o denunciar: Cómo deshacerse de un usuario molesto en Twitter

Twitter es el reino de los trolls por excelencia, el lugar donde, amparados por el anonimato, muchos usuarios abusan de su poder y molestan, insultan, boicotean e incluso acosan a otros.
La compañía considera una lacra que haya quienes se abran perfiles, una y otra vez, para seguir sus planes de bullying, y por eso ha puesto numerosas herramientas en manos del resto de usuarios, «los pacíficos», para librarse de quienes no saben convivir en la plataforma.
Los usuarios sabrán que están bloqueados porque no podrán leer nuestros tuits en la cronología, ni interactuar con nosotros
Hasta el momento, si alguien nos incomoda en Twitter hay varias cosas que podemos hacer: la primera de todas es la de silenciar a un usuario.
Actualmente también se puede activar esta opción con gente que no seguimos, para evitar que la actividad que pueda derivarse de conocidos en común nos muestre sus pasos por Twitter. Así, no solo dejaremos de ver sus tuits o su actividad en nuestras notificaciones y cronología, sino que no tendremos información de lo que nuestros contactos hagan con esa persona en concreto.
Para silenciar, solo hay que ir al perfil del usuario y pulsar en el botón con forma de tuerca. Entre las opciones que aparecen, encontramos la de silenciar.
La segunda medida es más drástica e implica que no podremos entrar en el perfil de esa persona a leer sus tuits, pues estará bloqueada para nosotros del mismo modo que para ella. Si bloqueamos a alguien, además de desaparecer automáticamente de la lista de seguidos y seguidores, no podrá leer nuestra cronología.
Estas dos acciones pueden perdurar en el tiempo de manera ilimitada, y basta con entrar en el perfil del usuario para revertir ambas si así lo queremos.
Si el motivo del bloqueo de un usuario es lo suficientemente serio como para que haya infringido alguna norma de uso de Twitter, debemos denunciarle. La opción aparece en el mismo menú que encontramos al silenciar o bloquear. Twitter pide entonces que especifiquemos el motivo de la denuncia, y las sanciones más graves pueden conllevar la inhabilitación de la cuenta.
El algoritmo de Twitter rastrea la creación de nuevas cuentas para evitar que las personas que han cometido alguna infracción en la red social regresen bajo otro nombre, aunque no siempre son detectados.
Además, la plataforma también permite que se silencien ciertas palabras que pueden tener que ver con el usuario que hemos bloqueado, por ejemplo.