Twitter permitirá eliminar seguidores sin bloquearlos

Twitter prepara una nueva función que permitirá eliminar a un seguidor sin bloquearlo, en una acción que recibiría la denominación de «bloqueo suave«.
En el «bloqueo suave» el seguidor eliminado no será notificado ni quedará bloqueado
Para ponerlo en práctica hay que acceder desde la página web al perfil de la cuenta del usuario, acceder al listado de seguidores e ir buscando hasta encontrar aquel a quien se quiera eliminar. Habrá que pulsar sobre el icono con los tres puntos en horizontal que aparece junto al seguidor sobre el que se quiera practicar este «bloqueo suave» y seleccionar la opción «Eliminar a este seguidor», tal y como se muestra en una captura de pantalla difundida por la propia red social.
Lo que resulta más significativo es que al seguidor afectado por este «bloqueo suave» no se le notificará la acción y tampoco quedará bloqueado, por lo que su interacción no supondrá cambios para la experiencia con los contenidos publicados por el usuario protagonista de esta acción, a diferencia de un bloque efectuado por el modo habitual, donde en el timeline del seguidor bloqueado dejarían de aparecer los contenidos que publique el tuitero que le bloquea.
Otro cambio con respecto al bloqueo tradicional es que quien sea objeto de «bloqueo suave» podrá seguir enviando mensajes directos al tuitero que le haya bloqueado, incluso aunque no pueda leer sus tuits. Por otra parte ese seguidor puede volver a seguir al perfil que le ha practicado ese «bloque suave» cuando detecte que existe.
Desde Twitter se desarrolla esta nueva modalidad de bloqueo para los casos en los que alguien no quiera bloquear total o definitivamente a un seguidor, pero sí desea establecer un espacio en la interacción a través de la red social con respecto a otro usuario, ampliando el control sobre la experiencia y propiciando una herramienta de control para casos de acoso o comportamiento inapropiado o abusivo. También permite evitar las posibles repercusiones derivadas de un bloqueo por parte de quien se lo tome como una agresión y, en el fondo, supone conferir al usuario un mayor poder sobre el alcance de sus publicaciones, permitiéndole elegir a quién llegan sus tuits.
Se trata de una herramienta más que ofrece Twitter para establecer límites sobre los seguidores y sus intracciones, como el tope de 400 seguidores diarios introducido en su momento para intentar eliminar los abusos derivados de las cuentas de bots.