YouTube confiará en que los ‘youtubers’ señalen cuándo no deberían ganar dinero

YouTube lleva meses tratando de resolver un problema que no tiene fácil solución: Los anunciantes no quieren que su publicidad aparezca en determinados vídeos -ya sea por cuestiones ideológicas, propagandísticas, de seguridad…- y los youtubers se quejan de que el proceso que tiene la plataforma para decidir qué vídeos pueden llevar publicidad y cuáles no es completamente arbitrario.
YouTube prueba un programa de ‘Auto-certificación’ para los contenidos
La situación ha llegado a extremos como el vivido en 2017, cuando numerosos anunciantes retiraron sus campañas en masa de la plataforma porque su publicidad se mostraba en vídeos de contenido proterrorista. La última de las polémicas tuvo lugar hace sólo unos días, ya que varios creadores denunciaron que YouTube había retirado la capacidad de monetizar sus vídeos por incluir la etiqueta «Gay» o «Lesbiana». Aunque YouTube señaló que no había sido ese el motivo, lo cierto es que ninguna de las dos partes -youtubers y anunciantes- están contentas.
Este verano, incluso un «sindicato de youtubers» solicitó a la compañía que fuese más transparente a la hora de decidir qué vídeos pueden obtener ingresos o no, más allá de aclarar cuáles son las condiciones de su programa de Partners. YouTube señaló que se reuniría con ellos para conocer sus propuestas, aunque no aseguró que fuese a tenerlas en cuenta.
Ante toda esta situación, el director de Producto de YouTube, Neal Mohan, ha reconocido esta semana que se plantean una solución salomónica. Según el directivo, la compañía está experimentando con un programa de «Auto-certificación», por medio del cual serán los propios creadores los que señalan a YouTube qué contenido incluyen sus vídeos, si este puede ser controvertido o no y, por tanto, si puede mostrar publicidad o no.
En otras palabras, YouTube está probando a dejar de lado el algoritmo para «confiar» en lo que digan los propios youtubers. Obviamente, la compañía llevaría a cabo auditorías aleatorias para evitar el «fraude» por parte de los creadores. Si alguien miente y viola las normas de confianza, podría llegar hasta a ser retirado del programa de monetización.
De momento se trata únicamente de un test, pero Mohan ha manifestado que la compañía quiere encaminarse hacia iniciativas de este tipo, en las que sean los propios usuarios los que garanticen el correcto funcionamiento del servicio porque, en teoría, son los más interesados en ello.